Dedicado a todo el pueblo de Azua de Compostela grandioso y agradecido. A Selma Ruth y a Wilma Frances Díaz dos azuanas de bien.
“Porque no me avergüenzo del evangelio,
porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío
primeramente, y también al griego.”
El Apóstol Pablo
Por Daniel Efraín Raimundo
AZUA.- He visitado pocas veces en mi existencia terráquea la ciudad de Azua. Recientemente visito el “Índice” de la República. También tengo el ombligo en la tierra de. “Piquiní” Martínez y Nelson Plinio Pérez Jiménez Hay lazos que unen hasta el final de la existencia y Azua de Compostela es uno en lo que respecta a nuestra familia. Una de las razones que influyen negativamente en la concepción plena del sentido patria, estriba en el desconocimiento de los hombres que forjaron una nacionalidad, y que, con su genio y actitudes encomiables, hacen la historia de los pueblos.
Lo voy a decir, ¿y por qué no decirlo? Desde que visito Azua he notado la lucha incesante del licenciado Luis “Chito” Naut tratando de mantener encendida la tea azuana de sus grandes hombres; de sus mujeres gloriosas que le han dado sentido a un pueblo tan viejo como el dolor del hombre. Y en nuestro país, preciso es reconocerlo, existe una injustificada desaprensión en esa dirección, y es ahora cuando comienza a despertar un vigoroso y hermoso movimiento tendente a rescatar del olvido del tiempo a quienes consumieron lo mejor que tuvieron, en aras de moldear una patria libre y digna. Una patria libertaria y desatada de las cadenas del pecado, porque hubo hombres que le dijeron a ese pueblo que Cristo rompía las cadenas. Uno de esos hombres fue el misionero cubano, reverendo Hilario Díaz Bonachea, oriundo de Camajuaní, República de Cuba. Un hombre desprendido lo dio todo por los azuanos aun arriesgando en varias ocasiones su vida.
La provincia de Azua que se ha convertido en un fenómeno demográfico en las últimas décadas ha crecido de una manera asombrosa, ampliando su área de kilómetros cuadrados que tiene. Se ha notado la expansión económica de los pobladores de ese paradisiaco lugar. Desde la época de Trujillo hasta acá se han agregado calles inúmeras y se han agregado nombres a las mismas de prohombres, lugares y hechos, que han contribuido a consolidar la nacionalidad del lar azuano.
Setenta años han pasado y parece que fue ayer. La gran mayoría de los azuanos, en muchos casos, ignora los pormenores más sobresalientes en torno a las personalidades cimeras desde nuestro inmaculado Juan Pablo Duarte, indiscutido Padre de la Patria dominicana hasta aquel grandioso adalid de la pluma libertaria Miguel Ángel Garrido. Y así, en muchos ejemplos, que pueden ser todos.
Imbuido en esa inocultable realidad, el Ayuntamiento del municipio de Azua, uno de los más antiguos del Nuevo Mundo, ha considerado como un insoslayable deber suyo, el concretizar, en una obra útil, práctica, al alcance de todos contentiva de los perfiles, sintetizados, de los nombres de figuras ilustres que ostentan las calles de la ciudad hermosa y antigua llamada Azua que conforma parte intrínseca de la antigüedad del Hemisferio Occidental. Con la asistencia de aproximadamente 100 habitantes del Sector San Miguel, del populoso Barrio de la Bombita, del municipio de Azua, de forma unánime fue aprobada por una nutrida Comisión del Honorable Concejo de Regidores del Ayuntamiento del municipio azuano la rotulación de la calle “Reverendo Hilario Díaz Boanachea”, eximio sembrador de fe y esperanza, cuya impronta de servicios de amor, forma parte indisoluble de la Historia del Cristianismo de todos los azuanos.
El licenciado Luis “Chito” Naut entiende que el Ayuntamiento municipal de Azua ha interpretado un deseo, una necesidad sentida, una utilidad palpitante en el ánimo popular, en todos los estratos sociales, que se nombrara una calle con el nombre del misionero, Reverendo Hilario Díaz Bonachea quien hizo labor religiosa, cultural y progresista en toda la provincia de Azua.
Los ciudadanos evangélicos de Azua agradecen al Honorable Alcalde Ing. Rafael Antonio Hidalgo Fernández por el gesto que junto al historiador de la municipalidad, licenciado Apolinar de León Medrano y a los Regidores de la sala capitular del cabildo azuano, tomaron en cuenta el nombre de un misionero evangélico para que quede esculpido su trayecto de bondad y bien en todos los corazones azuanos.
Al ver el gesto de los ciudadanos de esa barriada tan populosa sólo nos resta recordar aquel famoso poeta azuano nacido en 1881, llamado Ángel Felino Vicioso Visón cuando refiriéndose a Dios escribió en la última estrofa de su soneto, afirmando:
“Arrúllense tu voz por boca de los
vientos
que imprimen por los orbes sus trinos celestiales
con fuertes, medianos y suaves movimientos;
Y aliéntame los soplos que animan la
belleza,
magnifica epopeya, que en actos divinales,
plasmáramos tu numen, en toda su grandeza”.
Martí el Apóstol de la Independencia Cubana lo afirmó hace mucho tiempo: “Honrar, h
