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¿Quién fue José Rafael Abinader Wassaf?
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¿Quién fue José Rafael Abinader Wassaf?

Semblanza  del doctor José Rafael Abinader

José Rafael Abinader Wassaf: Servidor público, educador, empresario, político, escritor y ciudadano de vanguardia

El doctor José Rafael Abinader Wassaf fue un ciudadano de vanguardia, con una destacadísima carrera como servidor público, académico, empresario,  escritor,  y dirigente político. En todos los ámbitos de su fructífera vida cosecho  evidentes y relevantes éxitos y siempre fue notable su conducta de invariable rectitud y decoro, que lo definen como un ciudadano comprometido y ejemplar que sirvió con entrega, honestidad y determinación a los mejores intereses de su país.

José Rafael Abinader Wassaf  nació el 2 de marzo de 1929 en Tamboril, provincia de Santiago. Hijo del matrimonio formado por  José S. Abinader y Esther Wassaf, inmigrantes procedentes de Baskinta, un pequeño pueblo cristiano de las montañas de El Líbano.

Casó con Rosa Sula Corona Caba, con quien procreó a sus hijos José, Rita y Luis Abinader Corona.

Segundo más joven de una familia de 8 hermanos, y habiendo fallecido su Padre a la edad de 56 anos, José Rafael, de apenas 16 anos,  emprendió un camino de superación que no terminaría jamás, hasta el final de sus  días.

Al concluir sus estudios de bachillerato, por razones económicas, el joven tamborileño tuvo que esperar 3 años para viajar a Santo Domingo, “con 60 pesos para inscribirse en la universidad, pagar una pensión y sostenerse“, recuerda su familia.Durante sus tres años preuniversitarios en Santiago estudio mecanografía y contabilidad en el Instituto Cuello de Santiago.

Se inscribe en la Universidad de Santo Domingo, originalmente en la carrera de ingeniería, la que no pudo continuar porque era impartida en horas de la mañana y ya había conseguido un empleo en la Secretaría de Finanzas como mecanógrafo, con el que se sostenía.

Opta entonces por estudiar Derecho, carrera que se impartía en horas de la tarde. Graduado de doctor en Derecho, Abinader obtiene una beca para estudiar una maestría en Administración Pública del afamado centro de educación superior Fundación Getulio Vargas, de Brasil, y hace otros estudios en el exterior.

Identificado desde muy joven con las mejores causas del país, José Rafael Abinader emerge en la vida política dominicana como participante en el núcleo antitrujillista liderado por el héroe y mártir Salvador Estrella Sadhalá, uno de los ejecutores del tirano Rafael Leónidas Trujillo Molina.

Su experiencia de trabajo y conocida responsabilidad, honestidad e integridad en la Secretaría de Finanzas (hoy  Ministerio de Hacienda) lo califican para ser designado director del Impuesto Sobre la Renta en el gobierno del Consejo de Estado de 1962.
En 1963, cuando se inaugura el régimen democrático, es designado por el presidente electo, Juan Bosch, como Viceministro de Finanzas.

Tras el golpe de Estado al gobierno de Bosch, renuncia del cargo, y en 1965 es designado ministro de Finanzas por el gobierno revolucionario del coronel Francisco Alberto Caamaño, con la misión de preservar los bienes privados y públicos en la zona constitucionalista.

Su carrera en el servicio público sigue cuando en 1978 el presidente Antonio Guzmán lo designa Contralor General de la República, posición desde la cual en 1979 actúa como uno de los principales representantes dominicanos en la negociación para que la empresa norteamericana Gulf & Western repusiera a República Dominicana 38.7 millones de pesos, dejados de pagar al erario por operaciones bursátiles de la empresa norteamericana, Luego de intensa y desafiante investigación, logra demostrar la existencia de la deuda haciendo posible el reclamo de dichos fondos por parte  del Estado dominicano. Con esos  recursos se nutre el Fondo de Desarrollo de la región Este y se invierten en decenas de obras de infraestructura y obras públicas en general de dicha región.  Abinader fue también Secretario de Finanzas del gobierno del presidente Salvador Jorge Blanco, de 1982-1986, del que renuncia en febrero de 1984.

Alternativamente con su carrera como servidor público y dirigente político, José Rafael Abinader tuvo un especial interés por la educación, la que consideró siempre como una herramienta esencial para el desarrollo del país. En 1966 funda la Universidad Dominicana  O&M, academia de educación superior inspirada en una misión de llevar excelencia académica a todas las clases sociales. Hoy, esta Universidad a sus 52 años es la mayor privada de la República Dominicana, con unos 52 mil estudiantes.

El doctor Abinader fue también parte del movimiento renovador de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, habiendo sido electo  como vicerrector administrativo, en un difícil período en el cual esa institución debió defender con firmeza su fuero y la soberanía presupuestaria que le corresponden por Ley.

Junto con sus aportes a la educación, el doctor Abinader ha   tenido una prolífica carrera como escritor, que incluye las obras “Ideas económicas y sociales”, “Comentarios acerca del ahorro”,” Bosquejo de un estudio económico”, “La corrupción administrativa en América Latina” que también fue el título de una charla que dicto en el año 1986 en Harvard University, “La sociedad bajo escrutinio”,” Poemas antiguos”, “El Globo”; “Moneda Mundial”, “Verdades Históricas” entre otras  publicaciones.

El distinguido político y estadista José Rafael Abinader Wassaff fue Senador de la República por la provincia de Santiago, en representación del Partido Revolucionario Dominicano (1998-2002), función en la que se destacó como opositor a todo proyecto oneroso al interés nacional, y defender los principios de la alternabilidad democrática. En el año 1999 identificó y se opuso a lo que 15 años después sería el principal escándalo de corrupción del siglo, la primera obra de constructores brasileños, el Acueducto de la Línea Noroeste, por considerarlo sobrevaluado por las empresas Andrade y Odebrecht. Años después este proyecto se realizaría, pero con más de 20 millones de dólares menos e incluyendo unas 6 comunidades más.

Fue Director Técnico del PRD hasta 1973.  En 1978 logra que el partido Alianza Social Demócrata, fundado por Juan Isidro Jiménez Grullón, se convierta en el único partido que acude unido a la candidatura de Don Antonio Guzmán y al PRD en las elecciones generales de ese año. Fue precandidato y candidato presidencial. Cuando el sector mayoritario del PRD decide constituirse en un nuevo partido, el Dr. Abinader le entrega, sin condiciones, a esa colectividad política, la franquicia electoral de la Alianza Social Dominicana, convirtiéndose en el Partido Revolucionario Moderno, del cual fue escogido presidente de honor y miembro de su dirección ejecutiva.

El doctor Abinader es también un exitoso promotor y desarrollador de empresas, habiendo incursionado activamente en el sector turístico, en el sector inmobiliario y de la construcción, rigiéndose sus distintas empresas por un escrito protocolo ético propio de su perenne conducta de maraca honestidad y eficiencia.  Su experiencia como economista le permitió servir como asesor en el área financiera a entidades públicas y privadas.

José Rafael Abinader fue partícipe en la primera línea de todos los grandes acontecimientos de la vida económica, política y social de la República Dominicana, en los últimos 50 anos. Ubicado siempre, sin confusión ni dudas, del lado de los mejores intereses y bajo las banderas de las más elevadas causas del pueblo dominicano, al que amó con todas las fuerzas de su corazón.

Ya casi en el umbral de su despedida, José Rafael desbordaba manantiales de amor y ternura para su familia, especialmente sus nietos. Le sobraban inquietudes teóricas y sociales para liderar la peña  que, por años, animó; le asistía el compromiso político para apoyar la carrera presidencial de su hijo Luis Rodolfo Abinader, conseguía fuerzas para asistir a sesiones de la Dirección Ejecutiva de su partido a defender sus posturas, y el sentido de la trascendencia le movía a desplazarse hasta su querido Tamboril a levantar una estatua al maestro Eugenio María de Hostos.

Se trata de un hombre que vivió digno y se marcha gallardo, incólume, dejando una impronta y un legado que llena de orgullo a su familia, a la Universidad que fundó,  su partido y su país. Agradecer debemos siempre al Todopodero por habernos concedido ese elevadísimo ciudadano y ejemplo de vida que hoy es una memoria paradigmática y marca indeleble llamada José Rafael Abinader Wassaf.

 

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