La redacción del periódico Los Remedios de Azua, adelanta a sus lectores el artículo «Mi Barrio», que forma parte de la obra que prepara Chito Naut sobre Azua
Por Luis Naut
Reseña de mi Barrio, hoy La Placeta.
Definir el tamaño del barrio no es tarea fácil. En la generalidad si no es una urbanización construida como complejo de viviendas es muy difícil establecer los límites del barrio. Los vecinos que tienen convivencia compartida porque lo ha generado la familia de los cercanos hogares, es el mejor indicador para determinar el conglomerado poblacional de la ciudad considerada barrio. En asamblea del «Club Mi Barrio» una noche en la casa de Juan Julio Buenrostro y Graciosa Rosso, se consensuó que Mi Barrio está limitado al Norte por la calle Hernán Cortés antes Quisqueya, desde La calle Bartolomé Olegario Pérez hasta la calle Dr. Armando Aybar. Al Sur desde la Dr. Aybar siguiendo la Roco Capano y doblando a la derecha de la calle 19 de Marzo hasta el final y luego desde general Pedro Santana con 19 de Marzo hasta la Bartolomé Olegario Pérez. Al Este desde la calle Hernán Cortés con Dr. Armando Aybar hasta la calle Roco Capano. Al Oeste la calle Bartolomé Olegario Pérez con General Pedro Santana hasta la Hernán Cortés. La genealogía de los fundadores del barrio es interesante. De ellos, comenzando con los Pineda provienen de Carlos Pina quien con Ana Silfa procreó a: Ismenia, Carmela, Humberto, Pilar, Josefa, Pindola, Ángel y German el ciego. Rafael Naut con Fiordaliza Matos procrearon a: Gregorio, Mauricia, Antonio, Manuela, Teresa, Mariquita y Pacito. Por otra parte, Camilo Sánchez con Isaura Navarro procrearon a: Badín, Camilito, Críspulo, Nísida, Marina y Natanael. Pedro Quezada con Margot Suazo procrearon a: Tolón, Dora, Aura, Ruru, Viola, Quinquiro, y a Súcutu. Por otra parte, la familia Gallito o Castro, estuvo formada por Joaquín, Pachito, Aura Estela, Luis Felipe, Ana y Lochin.
Este barrio donde tuve el privilegio de nacer, en el principio era un caserío habitado por zapateros, sastres, ebanistas, albañiles y algunas familias que en el campo tenían propiedades de café y otros rubros de los cuales se mantenían. En tiempo de cosecha estas acostumbraban a ausentan del barrio para obtener con la venta de los productos los ingresos de subsistencia. Al barrio le convino tener la escuela hasta 4to nivel Bartolomé Olegario Pérez (Los Tanques), que con muchas precariedades sirvió para formar a temprana edad a muchos niños pobres. Hoy a este barrio se le puede llamar la comunidad del maestro, porque en cada hogar reside un maestro o un maestro en retiro. En Azua el 13 de mayo de 1848 se produjeron tres eventos importantes. La llegada de la virgen de Fátima que la iglesia católica paseaba a nivel nacional, el voraz incendio que produjo un tanque de gas en la casa de (Viejito Sención), que estaba ubicada en la calle Bartolomé Olegario Pérez casi esquina Las Carreras y la entrada del Evangelio a Azua con los pastores, el cubano Hilario Díaz y la americana Minnie Prince quienes habían perdido todos sus ajuares que les transportaba el barco que sumergió en el mar durante la travesía. Esta pareja de dos blancos y extraños en el barrio que vivieron en condiciones no narrables en la casa de la calle 19 de Marzo esquina Hernán Cortés fue un acontecimiento en el vecindario. Su plan original fue establecerse en Barahona, pero la tragedia marítima les cambió los planea. En Barahona los pastores cubanos de apellido Reina, el dirigente evangélico, el señor Cabrera y el Dr. Cruz Ayala, quien en ese momento estaba casado con una bella mujer azuana de apellido Vándelinder lo convencieron que Azua era su campo blanco. El evangelio en Azua comenzó a crecer notoriamente en distinguidas familias urbanas y rurales, a pesar que sólo había tolerancia de culto en la país. El barrio vivió con el orgullo de que el héroe de la República Félix Jiménez (Félix Tancurria), nació y murió entre ellos. El barrio vivió con orgullo también, que sus patios fueron los preferidos por el bardo azuano Héctor José de Regla Díaz para hacer sus famosas bohemias que eran hasta esperar el sol. Parece ser que a Neftali Castro, miembro del famoso Cuarteto Flores y compañero de bohemia de Héctor, lo motivo a que en compañía de Perico Arias y Estela Reynoso (Hermana de Ileana Reynoso), la cantante de la voz más alta de la canción popular dominicana, hiciera una verbena durante años en su casa o en el famoso bar (El Buitre). Además, el barrio tuvo renombre con los palos de Miñica Céspedes, que celebraba cada 29 de septiembre con tanta popularidad que atraía cada año al famoso folklorista dominicano Fradique Lisardo.
No podemos dejar destacar el rol que en su tiempo jugo el Club Mi Barrio, que cada año celebraba en la esquina de Prospero Arias, su famosa Feria del Maíz, que organizaba Martha Minaya, por patrocinio de la compañía Maicera Dominicana. El Club Mi Barrio, logró una actividad nunca vista en el país, con un acto donde vecinos homenajeaban a sus vecinos, destacado en el periódico EL Nacional de la época, por la pluma de Gustavo Guerrero. Fue el caso del reconocimiento que se les hizo a: Elba Arias, Rafael Basora, Servia Navarro, Guido Quezada y Miñica Cépedes, estos dos últimos Postmorten.
Cada barrio tiene sus personajes especiales o folclóricos. Mi Barrio tiene los filósofos de la calle: Tocito Arias, Federico Pinales y Tajillo González, que con sus ocurrencias ellos han contribuido al folclorismo de barrio.
En este barrio vivieron y se formaron jóvenes que fueron y que son ejemplo en valores éticos. Gilberto Céspedes, Bianelo Céspedes, Bernardo Fernández, Juan José Díaz Sención, José Ernesto Naut, Rafael Pérez, Guido Quezada, Dilcia Vitalina Chalas Soto, Sócrates Mañón, Juan Julio Buentrostro, Altagracia Fabal , Eduviges Arias, Cecilia Reyes, Luis Eugenio Sención (Babby), Flerido Méndez, los hermanos Julia, Mery y Ramón Céspedes, Federico Jiménez, Altagracia Arias, Juana Perdomo, Antonia Arias, Irma Perdomo, Manolo Montero, Pino Jiménez, Julia Buenrostro, Guillermo Díaz, Luis Amaury Díaz, Andrés Sención, Milka Sención, Nicolas Montero, Bartola Agramonte, las hermanas Rosario y Mercedes Naut, Gladys Nury de los Santos, Palile Pineda, Chacho Sención, Juan Ramón Pineda, Librado Pérez, Liliam Noboa Naut, Pedro Quezada Canario y otros tan importantes que éstos.
Lo ético de estos personajes fue el fruto de la crianza de parejas como la de Odulio Marchena y Rosa Céspedes; Narciso Agramonte y Dolores Peguero; Humberto Céspedes y Fabiola Arias; Altagracia Fernández y Miguel Pérez, Chinchin Díaz y María Sención, por citar algunas.
El primer comité de base del PRD o llámese de la resistencia antitrujillista en Azua y del país lo fundó el mismo Juan Bosch en la casa de Nununa Arias (la abuela de Machú PLD), resultando presidente Jesús Rossó Zayas y secretaria Ágata Arias (la hija de Cununo Jiménez y Lucia Arias). Una vez terminó el acto de juramentación del Comité Provincial en el año 1961 en la casa de Jesús Mella de la calle Miguel Ángel Garrido cerca del mercado público; Juan Bosch vestido de blanco atravesó el mercado y cuando hizo el juramento correspondiente en la casa de doña Nununa su traje ya era del color del arcoíris.
En lo sociológico y religioso, se produjo algo inusual en Azua, los evangélicos del barrio que poblaron la iglesia evangélica, tales como: Piquiní Martínez, Manuel Lama, Neró Soriano, Elio Abreu, América Naut, Pedro Méndez, Jesús Mella, las hermanas Bélgica y Altagracia Navarro, Lidia Ortiz de Gerónimo y Nelson Plinio Jiménez que no eran del barrio, comenzaron a predicar al mismo tiempo en la ciudad y en los campos cercanos la Palabra de Dios y el PRD como opción política. Mi barrio sigue siendo una comunidad de gentes muy sanas y amantes de la política y el saber, con un sentimiento de azuanidad que lo distingue.