Liderazgo y gestión directiva en UTESUR 3/4
Guillermo Díaz
Los procesos que se realizan diariamente en las instituciones de educación superior, son complejos por naturaleza. Articular los pilares fundamentales de las IES, esto es docencia, investigación y responsabilidad social, no resulta nada fácil. Solo la implementación del currículo demanda de gestores con una visión holística, capaces de conjugar lo simple y lo complejo en la planificación de la docencia, la investigación y la responsabilidad social, de suerte que sus estudiantes al momento de egresar de sus aulas se comporten como sujetos comprometidos con los hombres y mujeres de la sociedad.
Por el grado de complejidad de los procesos inherentes a las IES, sus cuadros dirigentes, más que esto, deberían ser verdaderos líderes. La responsabilidad de conducir procesos formativos, garantizando la calidad de los egresados no es tarea fácil, requiere de un trabajo de equipo bien enfocado.
La señora María Rosario Melo Muñoz fue designada como rectora de la Universidad Tecnológica del Sur, hasta este momento se ha desempeñado con cierto nivel de liderazgo; el desempeño de la actual rectora proyectado a futuro es muy importante puesto que todo equipo de trabajo necesita de un buen coordinador, diría más que esto un motivador con visión y enfocado en alcanzar las metas institucionales enunciadas de forma explícita en su visión y misión.
A propósito de las reflexiones que compartido con los académicos de la UTESUR en estas tres entregas, no es casual. Recibí en los primeros días del mes de febrero del año en curso el Volumen 3 Núm. 5 Año 2021 de la Revista Peruana de Educación. En este número se publica un trabajo de investigación de la destacada académica española, Claudia Divani Maza Sócola. El epicentro de dicho trabajo gira en torno a la gestión educativa directiva, la destacada académica asevera al respecto gestión educativa es un proceso altamente interactivo y compartido, donde en un mismo proceso los miembros de los equipos desarrollan sus habilidades, implicando una estrategia, visión, dirección, para llegar a una meta, colocando a las personas y al mismo tiempo motivándome para que desarrolle la capacidad de escuchar para poder descubrir (Pág. 15)
Comparto el criterio de Bush y Glover (2003) con respecto al liderazgo en el sentido de que el líder es esa persona que en el proceso ejerce influencia en los demás miembros del equipo orientadas a la “consecución de ciertas metas y fines deseados, articulando una visión compartida con el personal y otros actores involucrados sobre estructura, filosofía y las actividades que deben orientar a la escuela. Este es el motivo por lo cual dentro de las universidades, digo yo, los líderes conducen los procesos que allí se desarrollan en una constante búsqueda de innovación, calidad, aprendizaje efectivo y un clima escolar acto para el desarrollo positivo del ser humano”.
Las IES operan con base a una normativa que regula la estructura y su desenvolvimiento. La normativa define las atribuciones de los sujetos partes de la institución. Establece de manera clara alcance y límite de los responsables de dirigir la estructura. La estructura está configurada por espacios (toma de decisión, operativos). El líder debe estar presente en todos los espacios en virtud de que una de las características del líder es saber ser y saber hacer. De ahí que no se nace siendo líder, es una condición que se va adquiriendo en la vivencia del discurrir.
La otra mirada, el liderazgo de la UTESUR debe emplearse a fondo para convertirla en la referencia de la región, el país y en el extranjero. Esto se puede lograr si se comienza hacer lo cosas diferentes a las que siempre se hacen, comenzar a hacer cosas nuevas conjuntamente es el reto que las circunstancias le imponen al liderazgo de la UTESUR. Es tiempo para reinventar la academia, pensar en grande pisando firmemente en la tierra.
17/3/2022